Dentro de tres horas estaré –por fin- frente a la poesía de Matilde Casazola. Algo en mi interior intuye que será importante. A modo de irme preparando recorro La carne de los sueños, el único libro suyo que poseo (por ahora). De pronto tropiezo con el siguiente poema:
34
Mi mundo está vacío
como anillo sin su dedo.
Cada mañana me pregunto:
-¿Debo ir allí o no debo?-
… y la locura me transporta,
como una alfombra mágica
al País del Sueño.
EL PAÍS DE MATILDE
11 de abril de 2008
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
2 comentarios:
Felicidades querido Profe, por la publicación del libro. (llego un poco tarde -como casi siempre- pero presente al fin)
Un abrazo a la distancia y un ¡salud! por la dicha de estar felíz.
Felicidades querido Profe, por la publicación del libro. (llego un poco tarde -como casi siempre- pero presente al fin)
Un abrazo a la distancia y un ¡salud! por la dicha de estar felíz.
Publicar un comentario