Para no olvidarte...

14 de enero de 2009


Ángel González es uno de mis poetas predilectos… y ni siquiera tengo un libro suyo.



Entre su obra poética figura "Áspero mundo" (1956), "Grado elemental" (1962), "A todo amor" (1988), la antología "Lecciones de cosas y otros poemas" (1998), la selección personal de cien poemas y otros inéditos "101+19=120" (2000) y "Otoño y otras luces" (2001).

El pasado lunes se cumplió un año de su muerte. Escribía así.
ASÍ PARECE

Acusado por los críticos literarios de realista,
mis parientes en cambio me atribuyen
el defecto contrario;
afirman que no tengo sentido alguno de la realidad.
Soy para ellos, sin duda, un funesto espectáculo:
analistas de texto, parientes de provincias,
he defraudado a todos, por lo visto;
¡qué le vamos hacer!
Citaré algunos casos:
Ciertas tías devotas no pueden contenerse,
y lloran al mirarme.
Otras mucho más tímidas me hacen arroz con leche,
como cuando era niño,
y sonríen contritas, y me dicen:
qué alto,
si te viese tu padre…,
y se quedan suspensas, sin saber qué añadir.

Sin embargo, no ignoro
que sus ambiguos gestos disimulan
una sincera compasión irremediable
que brilla húmedamente en sus miradas
y en sus piadosos dientes postizos de conejo.
Y no sólo son ellas.
En las noches,
mi anciana tía Clotilde regresa de la tumba
para agitar ante mi rostro sus manos sarmentosas
y repetir en tono admonitorio:
¡Con la belleza no se come! ¿Qué piensas que es la vida?

Por su parte,
mi madre ya difunta, con voz delgada y triste,
augura un lamentable final de mi existencia:
manicomios, asilos, calvicie, blenorragia.
Yo no sé qué decirles, y ellas vuelven a su silencio.
Lo mismo, igual que entonces.
Como cuando era niño.
Parece que no ha pasado la muerte por nosotros.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Qué buen texto!!!
Gracias por compartirlo.
Un abrazo, y suerte con tu silencio.

La Vero Vero dijo...

Mi Arcángel...

Sus libros son un recurrente peligro, créeme...un año ya de que nos dejó sin su luz.

Un abrazo por EL poeta.